Ciudad de México.- México y Estados Unidos tienen puntos de vista diferentes sobre muchos temas, pero estamos comprometidos a que esas diferencias no sean tan grandes como las oportunidades que tenemos al trabajar juntos, afirmó el embajador estadounidense en nuestro país, Ken Salazar.
La ausencia del presidente Andrés Manuel López Obrador en esta reunión “no va a afectar en nada” la relación bilateral, añadió.
Reconoció que el fenómeno migratorio que se vive hacia su país no tiene precedentes y lo calificó de histórico, pero lo explicó señalando que la gente huye de dónde no encuentra posibilidades de trabajo, educación y desarrollo.
Sostuvo que los programas bilaterales para llevar trabajadores mexicanos a los EU no están funcionando y es necesario repensarlos.
Sobre el anuncio de su gobierno, hecho durante la cumbre, respecto a ampliar la cuota de acceso a migrantes, señaló que aún analizan el número de extranjeros que se podrían beneficiar, así como los esquemas a utilizar para un flujo ordenado y legal.
Defendió la postura de su gobierno para no invitar a Cuba, Venezuela y Nicaragua a esta cumbre, pues dijo, se trata de países con problemas de democracia y respeto a los derechos humanos.
Finalmente, criticó la decisión de sus gobierno de acercarse a Rusia y a naciones de oriente, ya que sostuvo, la solución a los problemas del continente se encuentra en América.
Con imagen e información de La Jornada