Culiacán, Sin.- Al concluir el convenio de subrogación para la atención de derechohabientes del IMSS en hospitales privados, mujeres embarazadas que requieren atención de partos y cesáreas así como pacientes programados con cirugías quedaron desprotegidos.
Luego de concluir este convenio el pasado 23 de mayo, Lizbeth Hernández, derechohabiente del Instituto Mexicano del Seguro Social con 34 semanas de embarazo aseguró que teme por su futuro y el de su bebé, pues su médico familiar le pidió regresar hasta el 12 de junio para conocer si las autoridades extendieron este convenio.
“Ayer fui al Seguro con mi médico familiar y me dijo que me tengo que esperar hasta la semana 37 de embarazo para ver si se iba extender la prórroga de atención a embarazadas”, contó.
La joven mujer, quien tendrá a su bebé mediante una cesárea, expresó que se siente desprotegida y sin saber que hacer, pues ante la pandemia no puede ser atendida en los hospitales del IMSS y carece de recursos para pagar una cesárea en un hospital privado.
“Me siento desprotegida, desesperada por saber que va a pasar durante esta pandemia, de saber si voy a poder tener a mi bebé en el hospital del Seguro Social o en cual hospital, sabía que había un convenio para tratar a mujeres embarazadas en particulares pero me dice mi médico familiar que ese convenio ya terminó”, expresó.
La subrogración de servicios incluyó atención de partos y cesáreas, cirugías por apendicitis, hernias y otras cirugías.
En caso de urgencias médicas los derechohabientes debían acudir en primera instancia a las unidades del IMSS, donde eran referidos a los hospitales privados que formaron parte del convenio.
