Los Mochis, Sin.- El tratar de ser vehículo de comunicación entre la ciudadanía y los entes gubernamentales es parte de la satisfacción y el orgullo que a lo largo de 33 años de carrera han dejado a Manuel Hernández Rivera.
El periodista de Altavoz fue reconocido por su trayectoria por parte de la Fraternidad de Comunicadores, en el marco de los festejos de la Libertad de Expresión.
El comunicador habló sobre la gran responsabilidad de ejercer el periodismo en estos tiempos, donde debe existir el compromiso de trabajar con responsabilidad para trascender gobiernos y generaciones.
“La gente requiere de que alguien la escuche, la gente requiere que alguien transmita esa situación que la está agobiando en ese momento, problemas inclusive personales que te plantean, y que quieren que tú los lleves a las instancias correspondientes para la solución, esa es una parte del periodismo que yo no cambio con nada, ser vehículo entre la autoridad, la ciudadanía y el problema que puedan tener, eso es una gran satisfacción y ejercer el periodismo con responsabilidad, objetividad”.
“…estamos en tiempos históricos, o nos defendemos o morimos y yo creo que en la medida que ejerzamos un periodismo objetivo responsable, certero, critico, vamos a traspasar gobiernos que pretenden en un momento dado aniquilarnos o minimizarnos, hagamos periodismo responsable”, comentó.
El periodista Altavoz describió esta profesión como una pasión insaciable, donde no basta con la satisfacción de crear una noticia o tener una primicia, siempre se piensa en la noticia que surgirá en los minutos siguientes y en el objetivo de mantener a la sociedad informada.
“El periodismo, los que abrazamos esto con pasión y con agrado y profesión que a todos nos caracteriza, es una pasión insaciable, que sólo puede digerirse y humanizarse por las confrontaciones descarnadas por la realidad que a veces nos rebasan; nadie que no lo haya padecido puede imaginarse esa servidumbre que se alimenta de las imprevisiones de la vida, nadie que no lo haya vivido puede concebir el pálpito sobrenatural de la noticia”.
“…todos lo vivimos a diario, todos lo padecemos a diario desde esta trinchera, el orgasmo de la primicia lo sintieran ustedes, se los recomiendo, también el dolor moral del fracaso cuando no encontramos las notas y muchos la padecen a diario, nadie que no haya nacido para esto podría persistir un oficio tan incomprensible cuya obra se acaba después de cada noticia, pero que no concede ni un minuto de paz con más sabor que nunca en el minuto siguiente, en el minuto de la búsqueda de la próxima noticia”, destacó.
Manuel Hernández Rivera llamó a los compañeros del gremio a ejercer el periodismo con profesionalismo.
