Guamúchil, Sin.- La reducción de la jornada laboral de 48 a 40 horas de trabajo sería un golpe duro para el sector empresarial debido a que muchas empresas que no pueden tener una plantilla laboral grande y se verían en la necesidad de cerrar sus puertas o migrar al sector informal, aseguró el presidente de la Cámara Nacional de Comercio del Évora.
Carlos Alonso Orduño López indicó que los empresarios tienen sus metas, planes de producción y crecimiento basados en una jornada laboral de ocho horas diarias de lunes a sábado, por lo que sería una afectación drástica para el sector empresarial.
“Puede ser podríamos, nos vamos adaptar algunas empresas y siempre va haber campos de oportunidad, pero algunas empresas no están en esa posición de aceptar esos cambios”.
Enfatizó que tiene más beneficios estar en la informalidad ya que nunca se les checa, no se les exige que cumplan con la norma y se les toleran muchos incumplimientos y hasta reciben apoyos del gobierno, y las agresivas medidas de revisión del gobierno son para el sector formal y en cualquier incumplimiento reciben sanciones de parte del gobierno.
“Día con día se dan los cierres de negocios porque están muy agresivas las medidas del gobierno al comercio formal y todo mundo nos revisa y nos checa; no estamos en contra pero sentimos que son recaudatorias, no son para buscar el beneficio de los colaboradores sino recaudatorias y con eso no hay lucha: ‘cooperas o cooperas’”.
