Occidente multiplica los esfuerzos diplomáticos para frenar una eventual invasión de Ucrania por parte de tropas rusas.
En medio de una crispación que ya lleva semanas, el presidente ruso Vladimir Putin y su par francés Emmanuel Macron concordaron en “la necesidad de una desescalada”, informó la Presidencia francesa.
Macron y Putin “se pusieron de acuerdo en la necesidad de continuar el diálogo”, dijo una fuente del Elíseo tras la conversación telefónica entre ambos líderes, de algo más de una hora. Aún así, “el diálogo es difícil”, ya que “tenemos desacuerdos muy importantes”, reconoció.
Francia cree que el intercambio de ayer “ha permitido dar más credibilidad al diálogo en este periodo de tensión” y a la “necesidad” de una desescalada en Ucrania, cerca de cuyas fronteras Rusia ha desplegado en torno a 100 mil soldados y un importante arsenal militar.
En tanto, el primer ministro británico, Boris Johnson, informó que intensificará los esfuerzos diplomáticos para evitar un “baño de sangre en Europa”. El premier británico dijo que conversará durante la próxima semana con Putin, y se espera que anuncie en los próximos días un viaje a la región.
En tanto que el jefe de Estado Mayor de Estados Unidos, el general Mark Milley, advirtió que un conflicto en Ucrania tendría “consecuencias espantosas”.
“Pueden imaginarse cómo quedarían las zonas urbanas densas”, afirmó el oficial, quien prevé “una cantidad significativa de bajas” en el caso de una ofensiva rusa.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, recalcó por su parte durante una rueda de prensa con medios extranjeros en Kiev que “la probabilidad de ataque existe, no ha desaparecido y no fue menos grave en 2021”. Pero también señaló que “no hay ninguna escalada superior a la que ya existía” el año pasado.
“No necesitamos este pánico”, subrayó Zelenski, pidiendo además a Rusia que haga un gesto en aras de una “desescalada”.
Rusia niega tener proyectos de invasión, pero se considera amenazada por la expansión de la OTAN hacia el este en los últimos veinte años y por el apoyo que los occidentales brindan a Ucrania.
Por ello, Moscú condicionó la desescalada a que la Alianza transatlántica interrumpa su política expansionista y se repliegue militarmente a las posiciones de 1997.
Estados Unidos y la OTAN rechazaron las principales exigencias rusas el miércoles.
AFP, EFE, Reuters y El Heraldo…