Guamúchil, Sin.- Las lluvias que dejó Norma en su paso por Sinaloa cambiaron el panorama para los agricultores, quienes con un semblante más halagüeño aseguran que en la región del Évora las opciones de siembre no sólo serán cártamo y garbanzo, ahora ya se puede pensar en sorgo y trigo y hasta maíz si, las condiciones lo permiten.
El presidente de la Asociación de Agricultores del Río Mocorito, Óscar Inzunza Inzunza, indicó que durante la mañana de este martes 24 de octubre la presa Adolfo López Mateos tiene aportaciones de 2 mil metros cúbicos por segundo, 800 metros cúbicos la presa Sanalona, 100 metros cúbicos la Eustaquio Buelna, y se espera que al término de la semana, cuando los escurrimientos terminen, se espera que las presas alcancen un 30 por ciento de almacenamiento aproximadamente de acuerdo a la experiencia.
Inzunza Inzunza pidió que este fin de semana ya se pueda determinar la asignación de agua a los módulos de riego para conocer cuánta agua se tiene disponible y determinar qué cultivos establecer.
“Vamos a tener una perspectiva mucho mejor, una perspectiva muy diferente que casi te puedo decir que el 100 por ciento de los predios está para sembrarse con la humedad que hay y ya vamos a esperar que los módulos de riego les den la asignación; ojalá se pudiera hacer este fin de semana, a más tardar el miércoles de la semana que entra, para que los productores ya sepamos y nos programemos qué podemos sembrar”.
El líder agrícola de la región del Évora detalló que el agua del riego de asiento que se ahorraron los agricultores podrán aplicarla en dos riegos de auxilio para un cultivo de media demanda como sorgo o trigo; y si los pronósticos de lluvias para finales de noviembre se cumplen podrán pensar en sembrar un poco de maíz.
También hubo pérdidas para algunos productores.
El presidente de la Asociación de Agricultores del Río Mocorito indicó que los productores de tomatillo, cebolla, chile y algunas otras legumbres fueron los que se vieron afectados con las precipitaciones y tendrán que volver a sembrar con la seguridad de que habrá agua disponible para los riegos que necesitan.
“Productores se les inundó sus predios y esos van a tener una pérdida, pero por el beneficio que nos vino a dejar, como todo fenómeno hay pérdidas, pero el beneficio es mayor, esos productores que perdieron 3, 4, 5 o hasta 10 hectáreas van a poder re plantar el cultivo”.
Mencionó que un productor de cebolla pierde alrededor de 30 mil pesos por pelotilla de cebolla, que es una perdida considerable para el productor legumbrero.