Fue sin duda una buena prueba para el mexicano. Nada fácil resultó Billy Joe Saunders, como los detractores de Saúl Álvarez han catalogado a los rivales del tapatío. Al final, el Canelo noqueó al británico al cerrarle el ojo y obligarlo a no salir al noveno round, para convertirse en campeón unificado en la división de los Supermedios del Organismo Mundial de Boxeo.
Saúl Álvarez fue paciente, pero no por eso dejó de ir al frente. Buscó las zonas blandas en el estudio y pudo conectar un par de golpes al rostro, aunque eso despertó al intercambio casi al final del primer round. Ese mismo par se los atizó el mexicano a Saunders en el inicio del segundo, en el que se vio más suelto de manos, aunque más estático y obligado a la caminata del mexicano.
En el tercero tuvo más juego de piernas el británico, siguió con jab de derecha, justo el brazo que empezó a tacar con mayor ahínco el mexicano, que fue más prudente al momento de buscar el golpe al rostro de su rival, lo que consiguió con un upper cuando Saunders se agachó para esquivar. El protecto del europeo casi sale volando.
Siguió Billy Joe Saunders con su tendencia de jabs sobre el mexicano. Uno de ellos tal vez el mejor recetado en el quinto round, en el que se vio mejor el campeón de la OMB. También en el sexto recetó el británico, con un zurdazo pleno al mexicano, que respondió con un par de uppers que sacaron la versión burlona de su oponente. De no responder, Canelo hubiese caído en una desconfianza.
Intercambió las guardias el británico y el mexicano siguió pegando en las zonas blandas, con fintas que se comía Saunders en el séptimo. Pero en el octavo, Canelo cerró bocas y le puso tres uppers para cerrarle el ojo al británico, que no salió al noveno round por tener problemas de visión.
Con información de El Heraldo…
