Ciudad de México.- Pobladores del municipio mexicano de Aguililla, en el estado de Michoacán, destruyeron un helipuerto militar como una medida de presión para que se combata a los cárteles de la droga que operan en la región.
El hecho ha aumentado la tensión en Aguililla, municipio enclavado en la región de Tierra Caliente de Michoacán y que permanece sitiado por sicarios de los cárteles Jalisco Nueva Generación (CJNG) y de La Nueva Familia Michoacana, quienes se disputan el control de la zona.
Los inconformes utilizaron dos máquinas retroexcavadoras para realizar zanjas en la montaña, ante la mirada atónita de los militares resguardados en el cuartel.
La semana pasada pobladores atacaron el cuartel militar arrojando piedras, palos y explosivos caseros, por lo que el Ejército repelió la agresión con gases lacrimógenos, bombas de humo y proyectiles antimotines.
Desde diciembre del 2020, Aguililla vive una crisis humanitaria derivada de una cruenta lucha entre los cárteles Jalisco Nueva Generación (CJNG) y de La Nueva Familia Michoacana (LNFM), los cuales se disputan el control de la producción y tráfico de droga, así como otras actividades ilícitas como secuestros y extorsiones.
La grave ola de violencia que vive Aguililla incluso motivó, el pasado 23 de abril, la visita de Franco Coppola, nuncio apostólico en México y representante del Papa Francisco, quien se reunió con miles de pobladores a quienes llevó un mensaje de paz y antes quienes de lamentó la falta de atención por parte de los gobiernos federal y estatal.
Los habitantes de Aguililla padecen la falta de alimentos, medicamentos e insumos de primera necesidad, ante socavones y barricadas que sicarios han instalado en la carretera que une Aguililla con los municipios de Buenavista y Apatzingán, el principal acceso a esa zona.
En tanto, familias originarias de Aguililla han convocado para el próximo fin de semana a una colecta de víveres en Morelia, capital del estado, para intentar entregarlos a las víctimas de la violencia.
Con información de Forbes