Los Mochis, Sin.- A pocas horas de que se lleven a cabo las celebraciones por fin de año, el uso de la pirotecnia se convierte en unas de las mayores amenazas para nuestras mascotas, es por ello que médicos veterinarios de Los Mochis lanzaron un llamado de alerta a la población por el incremento en los accidentes y atropellamientos por crisis nerviosas en mascotas provocados por los estruendos.
Joel Ruiz, médico veterinario explicó que el oído de los perros específicamente es más sensible que el oído humano, lo que convierte el ruido de los fuegos artificiales en una experiencia aterradora para ellos, es por ello que su instinto los obliga a salir corriendo despavoridos, ocasionando riesgos de accidentes como los antes mencionados.
“Si les afecta mucho porque no saben lo que está pasando, se ponen muy nerviosos, pueden llegar a lastimarse con los movimientos que hacen, pueden llegar a correr, salir de su casa, que un carro pase y los atropelle, entonces si es un riesgo que existe, en estas fechas si llegan muchos perritos atropellados o con problemas por pirotecnia”.
Para disminuir el impacto de los ruidos y evitar que nuestras mascotas entren en pánico, los expertos recomiendan el uso de auxiliares de relajación vía oral como CBD, que es una sustancia química que tranquiliza a los perritos y que está disponible en la mayoría de las veterinarias donde se recomienda que sea administrado media hora antes de que empiecen los cohetes para mayor efectividad.
“Lo que podemos hacer son dos cosas, les damos premios con CBD, que nada más los relaja para estas fechas, también hay unas gotitas vía oral que también los relaja, son métodos que usamos nosotros”.
Para las personas que no tengan oportunidad de conseguir estos relajantes, otra de las opciones es mantener en resguardo a las mascotas en un lugar que esté lo más alejado del ruido, de preferencia poner música tranquilizante y de ser necesario, acompañarlo para que sientan mayor seguridad, sin embargo, la principal recomendación es evitar el uso de esta pólvora y hacer conciencia en los familiares y en los niños sobre los riesgos en el uso de estos artefactos que pueden ser dañinos.








