Ciudad de México.- Demostraremos que fue buena la decisión de no construir el aeropuerto en el Lago de Texcoco, por muchas razones, y una vez inaugurado el Felipe Ángeles es posible que se haga un análisis sobre la decisión que se tomó para que todos tengan elementos suficientes, que vengan los técnicos y que expongan, pero ya con los datos que existen, ya se puede decir que fue una “muy buena decisión”.
Primero por la calidad, porque no puede ser lo mismo un aeropuerto en suelo irme que un lago donde hay hundimientos de manera permanente. Pero esto no es un invento, es cosa de ir a Texcoco y van a ver cómo está la carretera con esos hundimientos diferenciales.
Es cuestión de ver cómo está el Aeropuerto de la Ciudad de México en lo que se conoce como la Terminal Dos, el hundimiento, se tiene que reparar porque cada vez se hunde y se tienen que poner más rampas.
Es una aeropuerto que se construyó hace poco tiempo porque no es suelo firme. Es la calidad, es un aeropuerto bien construido, muy bien hecho, muy bello, tiene buena ingeniería, y es muy buena la arquitectura.
López Obrador dijo que también el tiempo de construcción que fue tres años para tres grades pistas de concreto, con terminal, con toda una ciudad construida, nueva, con unidades habitacionales, escuelas, hospital, museos, centros deportivos, es una hazaña, eso no se hace en otras partes.
En tres años un aeropuerto así, es un área en total de 4 mil hectáreas, y tiene para ampliación. Y luego el costo, es cuestión de revisar datos y habían estimado terminar el aeropuerto de Texcoco con un costo de 300 mil millones de pesos.
Se está ahorrando 125 mil millones de pesos en el Felipe Ángeles. Con eso se está financiando el 70 por ciento del Tren Maya en sus mil 500 kilómetros en el sureste.
Poco a poco se van a ir convenciendo los que tenían una idea distintas, unos porque había intereses creados, y era un barril sin fondo.