Guasave, Sin.- Temerosas de contar todo el viacrucis que han tenido que vivir durante casi 11 años, después de que se vieron obligados a abandonar sus hogares, sus tierras y perderlo todo, hasta familiares por la violencia, batallar por la renta o conseguir prestado, hoy por fin se les hace justicia, al recibir un terreno por parte de las autoridades, que a decir de una de las desplazadas, van a poder construir su nuevo hogar, porque pensar en regresar sería prácticamente imposible.
“Ya vamos a cumplir 11 años, entre marzo y abril fue cuando salimos de allá, ahorita nos sentimos muy contentas, muy feliz, de que ya gracias a Dios y a quien hizo posible esto de que nos van a entregar el título del terrenito, donde vamos a poder hacer una casita”.
“Teníamos animalitos, se vivía allá de lo que se trabajaba, y pues no hemos vuelto para allá, no hemos buscado la forma de regresar porque no tenemos ya cómo trabajar porque lo que se tenía para trabajar todo se perdió, y yo perdí a un hermano”.
Otra de las mujeres desplazadas, dijo que ha sido muy difícil adaptarse a la vida de la ciudad, ya que es muy diferente a lo que estaban acostumbrados en la sierra, y los hombres tienen que trabajar en el campo pero a hay días que se gana y hay días que no.
“Fue muy difícil adaptarse uno a la vida de acá porque es muy, muy diferente a lo que nosotros estábamos acostumbrados y todas las familias”.
