Ciudad de México.- El Presidente Andrés Manuel López Obrador defendió su relación con el sector privado nacional y extranjero, y acerca de los procedimientos de licitación de obras públicas todo se ha apegado a la legalidad vigente, no ha habido empresas predilectas, como era antes.
Y volvió con el gobierno de Felipe Calderón que tenía como empresa predilecta, a Repsol de España, hubo ventajas para esta empresa que afectaron las finanzas del país; el Presidente Enrique Peña tenía otra, la OHL, favoritos, no se cumplía con la legalidad y eran obras que se cobraban con costos elevados.
“En el gobierno nuestro no ha habido empresas predilectas”, respondió López Obrador, “hemos actuado con absoluta transparencia”.