Culiacán, Sin.- “Es una pena Sergio Mario, traicionó a su partido, a su militancia, como maestro también simulaba, mandaba a su asistente a dar clases”, dijo el encargado de Despacho de la Universidad Autónoma de Sinaloa, Robespierre Lizárraga Otero.
Esto ante la iniciativa suscrita por el diputado Sergio Mario Arredondo, otros legisladores así como de los grupos parlamentarios de Morena y del PT para llevar ante el Congreso de la Unión un decreto que reforme y adicione el Código Nacional de Procedimientos Penales, para acotar el uso excesivo de instrumentos que están en la norma por parte de personas que enfrentan procesos legales, como la presentación de justificantes médicos u otras conductas dilatorias indebidas que retrasen los procesos.
“Si le molesta que alguien se enferme, que alguien meta un justificante y el juez de ellos, porque ya no podemos decir que es un juez imparcial, del Gobierno del Estado lo justifica pues es decisión del juez pues que no lo justifique”, dijo.
Aseguró que es “una pena que personajes” como el diputado Sergio Mario Arredondo, quien llegó al puesto por colgarse de un partido político, lo más trascendente que puede lograr es atacar a la universidad.
Lizárraga Otero dijo que él conoció a Arredondo Salas por tener problemas con las cuentas públicas durante su gestión como director del Colegio de Bachilleres del Estado de Sinaloa, las cuales finalmente aprobó en su carácter de presidente de la Comisión de Fiscalización del Congreso del Estado de Sinaloa.
“Su único aporte es pelearse con la universidad, es reducirse con la gran posibilidad que le dio la ciudadanía a ser un testaferro del gobernador, de Feliciano Castro, que lamentable porque yo lo tenía en un concepto diferente”, manifestó.
