Los Mochis, Sin.- A casi 3 semanas del voraz incendio que dejó a dos familias sin hogar en la colonia centro de la ciudad de Los Mochis, los afectados continúan a la espera de que lleguen los apoyos que les había prometido el ayuntamiento de Ahome.
La señora Indira Echeverría, madre de familia y una de las afectadas comentó que a los días de que lo perdieron todo, las autoridades municipales acudieron a su casa para evaluar los daños con el compromiso de que iniciarían con la reparación de los techos, las paredes, el sistema eléctrico y las tuberías. Sin embargo, los días siguen pasando sin ninguna respuesta concreta.
‘’Estamos en las mismas, el presidente vino el jueves, vino con su gente, vinieron a ver, les enseñé la casa de enseguida, me dijeron que iban a empezar aquí conmigo, el presidente dio la orden pero pues hasta ahí estamos y no han venido, ni qué onda, ni nada, a veces voy a trabajar un día y al otro día no voy pensando que a lo mejor van y aquí estamos en las mismas’’.
Por otro lado, la señora Indira contó que gracias a la solidaridad de la ciudadanía han recibido donaciones de camas, colchones, estufas y un refrigerador. Sin embargo, se suma el problema de que no tienen dónde meter los muebles, de ahí la necesidad de que las autoridades agilicen la llegada de los apoyos para poder estar nuevamente en casa.
‘’Que venga y mande para que nos hagan esto y meternos, se lo pido de todo corazón que venga y haga todo para poder meterme a mi casita, nos ha llegado apoyo de gente que nos ha ofrecido camas, colchones, una mesa, les hemos dicho que no hay manera de dónde meterlo, me han ofrecido estufa, un refrigerador, allá la tengo con la vecina en el porche’’.
A pesar de la intención de querer levantar su casa, la señora Indira contó que entre el trabajo de ella y su esposo es insuficiente para reparar su hogar, ya que él recibe un sueldo como carnicero y ella trabaja de manera informal en una lonchería para sacar adelante a sus 3 hijos.
Cabe mencionar que en todo este tiempo, la familia de la señora Indira, se encuentran alojados en la casa de su cuñada mientras llega el apoyo, a la espera de que puedan echarles la mano y volver a construir su hogar.