Guasave, Sin.- Mujeres que trabajan en el campo, específicamente jornaleras agrícolas, también viven situaciones complicadas en pareja y con su familia, y es que en muchas ocasiones autoridades en materia de seguridad han atendido reportes de riñas, sumado a las condiciones precarias en las que viven; sin embargo, la directora del Instituto Municipal de las Mujeres, Xóchitl Soto Fierro, aseguró que no han recibido ninguna petición formal de ayuda, aun cuando han sostenido encuentros en los diferentes recorridos que han realizado últimamente, como autoridad municipal.
La funcionaria resaltó que es evidente que no se animan a alzar la voz, aun cuando no estén en las mejores condiciones, por lo que en cada oportunidad que tienen les recuerdan que existe un organismo que puede ayudarlas y que la violencia está penada.
“Hemos visto la situación, por ejemplo, atendimos a una persona a una mujer que manifestó ser víctima de violencia por parte de su hermano, también jornalero agrícola; hemos aprovechado las visitas para recordarles que aquí en nuestro municipio y estado la violencia familiar es un delito y se castiga con cárcel”.
Reconoció que hasta la fecha no han tenido ninguna intervención oficial o legal, y consideró que el trabajo de concientización se tiene que seguir haciendo porque no se puede continuar con esos usos y costumbres que al final matan.
“Hemos hecho el trabajo de estarles recordando e informando que aquí esas cosas no deben de ser (…), es momento de acabar con esos usos y costumbres que estan fuera de toda legalidad”.
Y es que no sólo está la violencia que pudieran vivir como parejas, está también el caso reciente del feminicidio, porque así lo tipificó la Fiscalía de la menor encontrada semienterrada con signos de violencia en Juan José Ríos y que habitaba en una cuartería.
