Culiacán, Sin.- En un incidente cada vez más regular, varios artefactos de acero, conocidos como «ponchallantas», fueron arrojados sobre las vialidades cercanas a la torre de rectoría y el hospital de la mujer en Culiacán, alrededor de las 9 de la noche del martes 16 de julio. Afortunadamente, no se reportaron personas lesionadas, pero al menos 10 vehículos resultaron dañados.
Los afectados, quienes viajaban en distintos vehículos de marcas y modelos variados, transitaban por el bulevar Miguel Tamayo Espinosa de los Monteros y la avenida Villa de Castilla.
Las puntas afiladas de acero, lanzadas de manera artesanal, lograron perforar hasta dos o tres neumáticos en algunos casos, dejando las llantas inservibles.
Los conductores afectados tuvieron que retirar los vehículos para llevarlos a una llantera. Hasta el momento, se desconoce quiénes fueron los responsables de este ataque.
Las autoridades, incluyendo la policía de tránsito municipal, la policía estatal preventiva, la Policía Municipal y el ejército mexicano, acudieron al lugar para recabar información y ayudar a los ciudadanos a remolcar los vehículos. Además, se llevaron a cabo labores de limpieza para retirar las puntas afiladas y prevenir más daños a los automóviles.