Culiacán, Sin.- “Los moteles están como nunca de mal. La raza no quiere ni salir ni a darle besito a la querida”, comentó, al subrayar que el clima de inseguridad ha modificado incluso actividades cotidianas de la población.
De la Riva Flores explicó que, más allá de los incidentes registrados, es la percepción que se difunde sobre la ciudad lo que influye en el ánimo de los viajeros.
La ocupación hotelera en Culiacán continúa a la baja y los moteles enfrentan una de sus etapas más complicadas, derivado del impacto que la percepción de inseguridad ha generado en la movilidad de residentes y visitantes, informó José Manuel de la Riva Flores, presidente de la Asociación de Hoteles y Moteles de Culiacán.
El dirigente señaló que, aunque la actividad económica en la ciudad no se ha detenido, el sector de hospedaje sí ha experimentado una reducción notable en su flujo de huéspedes.
“Estamos viviendo un momento difícil. La llegada de visitantes ha disminuido porque muchos consideran que no es un buen momento para trasladarse a la ciudad”, explicó.
De acuerdo con De la Riva Flores, la ocupación se mantiene por debajo del 50% de lo que se registraba antes de que aumentaran los hechos violentos en la región.
“Si antes teníamos alrededor del 48% de ocupación, hoy estamos prácticamente a la mitad. Esto nos obliga a buscar estrategias para mantenernos a flote”, indicó.
El dirigente hotelero señaló que los moteles han resentido aún más la baja, ya que muchas personas evitan circular de noche o desplazarse a zonas alejadas del centro debido a la incertidumbre que genera la inseguridad.
“Los moteles están como nunca de mal. La raza no quiere ni salir ni a darle besito a la querida”, comentó, al subrayar que el clima de inseguridad ha modificado incluso actividades cotidianas de la población.
De la Riva Flores explicó que, más allá de los incidentes registrados, es la percepción que se difunde sobre la ciudad lo que influye en el ánimo de los viajeros.
“Cuando en medios nacionales circulan notas negativas, inevitablemente afecta. La gente lo ve, lo piensa dos veces y decide no viajar o no invertir”, dijo.






