Ciudad de México.- La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo negó que su gobierno cometa persecución política contra figuras y convocantes a la serie de marchas del grupo autodenominado “Generación Z” hacia Palacio Nacional, cuyo objetivo, según se dijo, eran por el hartazgo a la falta de seguridad y al crecimiento de la violencia y los ataques del crimen organizado en el país.
Sobre esa línea, la mandataria explicó que esta segunda convocatoria del 20 de noviembre de 2025 no tuvo la presencia esperada, dado que, afirmó, “la gente ya se informó” respecto a las intenciones de esta serie de movilizaciones sociales en contraposición a su administración:
“México nunca va a perseguir a nadie. Por cierto, un chico que estaba diciendo que lo estábamos ‘persiguiendo’… nosotros no perseguimos a nadie por sus ideas políticas, por lo que comunica, por lo que dice… por nada. E, incluso, si siente preocupación, se hace un análisis de riesgo y se le brinda seguridad”, afirmó.
Para cerrar el argumento, Sheinbaum Pardo insistió que su administración esta trabajando en otras cuestiones para brindar resultados actualmente.
La insistencia de Sheinbaum respecto al “vacío” a la Generación Z en CDMX
En otro momento de la conferencia matutina, la titular del Ejecutivo Federal volvió a reiterar que la convocatoria a esta protesta social fue bajo porque la gente ya está enterada, supuestamente, de las intenciones políticas de estas marchas:
“No fue cualquier cosa lo que ocurrió el sábado (15 de noviembre). Es muy importante que se investigue, que se vea (…). Y a todos, estar viendo estas pruebas, esto que sale. Que se informe todo mundo porque son cosas que no se pueden esconder. Poco a poco van saliendo”, detalló.
Finalmente, dio a entender que ve con buenos ojos que tanto el Congreso de la Ciudad de México somo otras instancias legislativas estatales estén pendientes, dijo, de los organizadores y todas las personas que han dado pie a estas agrupaciones en la capital y distintos estados de la República Mexicana.
Edson Andrade sale de México frente a presuntos vínculos con el PAN CDMX: estas fueron sus razones
En dias recientes, la dirigente nacional del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Luisa María Alcalde, acusó públicamente a Edson Saúl Andrade Lemus de mantener una relación laboral con el Partido Acción Nacional (PAN). Según documentos exhibidos por Alcalde, Andrade firmó un contrato en febrero de 2025 por 2 millones 106 mil 810 pesos para prestar servicios de estrategia digital y gestión de redes sociales al PAN CDMX.
En el acuerdo, Andrade figura como prestador de servicios y recibiría pagos mensuales por 175 mil 577.50 pesos durante 12 meses. Además, Alcalde publicó parte del contrato que incluye datos personales del joven, como su clave de elector y Registro Federal de Contribuyentes (RFC).
Para Alcalde, esta revelación reviste un significado político: pone en duda la “aparente neutralidad” de Andrade y su rol en la convocatoria a la marcha juvenil del 15 de noviembre. Andrade, por su parte, ha sostenido públicamente que su activismo es apartidista y ha negado afiliaciones políticas formales.
Con información de Infobae





