Los Mochis, Sin.- En medio del hartazgo y el calor, padres de familia y estudiantes de la primaria, secundaria y el telebachillerato de la comunidad de Jitzámuri tomaron las instalaciones del plantel para exigir la instalación de energía eléctrica, ya que desde su construcción en el año 2019, la institución jamás ha contado con este servicio indispensable para tomar clases.
En su mensaje, los padres de familia hacen el llamado a las autoridades educativas y al ayuntamiento de Ahome para que volteen a ver este plantel y apliquen recurso para que los estudiantes puedan tomar estudiar en condiciones dignas, lamentablemente a pesar de que han tocado muchas puertas, no han tenido ninguna respuesta positiva, es por ello que este martes decidieron radicalizar acciones y tomar la escuela.
‘’Estamos haciendo un llamado a las autoridades, al presidente municipal, a la titular de la SEPyC, Gloria Himelda Félix, a ver si nos escuchan porque están sufriendo mucho calor los muchachos aquí en el telebachillerato del campo pesquero Jitzámuri, ya hemos tocado muchas puertas, no hemos tenido soluciones de nada y la verdad ha habido muchachos que han tenido golpes de calor, es una injusticia, están tomando clases inhumanamente’’.
Por su parte, los estudiantes se dijeron cansados de tener que tomar clases debajo de los árboles, en medio del bochornoso calor para poder avanzar en sus estudios, ya que son condiciones indignas para los que quieren salir adelante, razón por la que también hacen la solicitud a las autoridades y les instalen la energía eléctrica, ya que su preocupación es que sus hermanos menores también tengan que tomar clases en estas condiciones.
‘’Estoy solicitando la luz porque es mucho problema estudiar sin luz, tenemos que salirnos a estudiar en los árboles, pedimos a la SEPyC que nos ayude para poder solucionar la luz y poder estudiar y tener calidad, tenemos muchos años sin luz, sufriendo, batallando y nadie nos apoya, nadie nos escucha, ya vienen más generaciones, nuestros hermanos y también ocupan estudio’’.
Y es que durante más de 6 años, esta escuela ha estado trabajando sobre la marcha sin energía eléctrica, sin aires acondicionados y con los estudiantes sufriendo los intensos calores de la temporada, donde además, también les preocupan las consecuencias como un golpe de calor o problemas estomacales por este problema añejo que ya tocó fondo en toda la comunidad escolar.