Washington.- El presidente Donald Trump tuvo los votos de unos ocho de cada 10 cristianos evangélicos blancos, en tanto los católicos se dividieron por igual entre él y su oponente demócrata Joe Biden, según VoteCast.
La fuerza de Trump entre los evangélicos blancos revela el éxito perdurable del Partido Republicano en un bloque de conservadores religiosos que han sido un pilar de la base política del presidente desde su victoria en 2016.
Las dos campañas apelaron a los católicos para que votaran de acuerdo con su fe. Los partidarios de Trump destacaron el apoyo de Biden al derecho de aborto, en tanto los de éste dijeron que el presidente no se ha ocupado de los problemas de justicia social que son parte del magisterio de su iglesia.
En caso de ganar, Biden sería el segundo presidente católico de la historia, después de John F. Kennedy.
Los votantes católicos constituyeron el 22% del electorado, fuertemente divididos por raza y origen étnico.
Entre los católicos hispanos, el 67% respaldó a Biden y el 32% a Trump, según VoteCast.
Los resultados electorales revelan que la Iglesia católica está tan dividida como nuestra nación, pero la división es racial y étnica, no teológica”, dijo David Gibson, director del Centro de Religión y Cultura de la Universidad de Fordham.
La brecha entre el voto católico blanco y el voto latino a favor de Biden constituye un desafío para los jefes de la iglesia, sobre todo si el Partido Republicano sigue seduciendo a los votantes blancos con su discurso antiinmigrante, añadió.
Entre los votantes sin filiación religiosa, Biden se llevó el 72% de los votos y Trump el 26%.
Los judíos constituyeron el 3% del electorado y se volcaron abrumadoramente a favor de Biden, con el 68% contra el 31%. Entre los musulmanes, el 64% de los votos fueron para Biden, el 35% para Trump.
Trump obtuvo un gran resultado en la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, los mormones. El 71% votó a favor de Trump, el 24% a favor de Biden.