Estados Unidos.- La pandemia de Covid-19 ha restringido casi todas las libertades en Estados Unidos, pero para Meghan Lindsey ha hecho lo contrario ya que nunca se había sentido más libre.
Viajar a la ciudad de Nueva York a los 33 años para trabajar como enfermera en una unidad de Covid-19 supuso la primera vez que Meghan, casada y madre de dos hijos, salió del suroeste de Missouri.
“Fue mi primera vez en un avión”, dijo esta trabajadora sanitaria, que cuenta que llegó a tener turnos de 12 horas en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Winthrop de la Universidad de Nueva York. “Al volar a Nueva York fue la primera vez que vi el océano”.
Hay muchas historias sobre muertes solitarias por coronavirus en los hospitales de la ciudad y trabajo traumático de enfermeras que los atienden.