Rusia.- El opositor ruso Alexéi Navalni lucha por su vida en un hospital siberiano este jueves después de beber un té con sospechas de que estaba envenenado.
Navalni será trasladado a Berlín para ser tratado en el hospital universitario de La Charité, según medios alemanes que se apoyan en declaraciones del activista Jaka Bizilj.
Un avión con personal sanitario y material médico podría volar a Rusia esta misma noche y en caso de que Navalni esté en condiciones de ser trasportado se trasladaría a Berlín mañana, asegura el diario Bild.
Si se confirma el envenenamiento, sería el caso más reciente de una larga serie, junto con sospechas de intoxicación, de personas que han caído en desgracia con el Kremlin, que niega que ajuste cuentas con sus enemigos asesinándolos.