Ciudad de México.- Adquirir un crédito de forma fácil puede ser algo que muchas personas esperan, sin embargo, esa misma facilidad puede poner en riesgo tu seguridad, tranquilidad y finanzas porque muchas veces estos financiamientos son fraudes o tienen prácticas abusivas.
Actualmente se promueven créditos muy accesibles, rápidos y con pagos chiquitos pero con intereses muy altos, se entregan el mismo día que se solicitan, en cuestión de horas, no piden fiadores ni garantías.
Ten cuidado con los créditos exprés, pues la facilidad para acceder a ese dinero puede costar caro, primero porque, si son reales, contemplan intereses muy altos, segundo porque quizá sean estafas, si te piden que pagues algo antes de entregarte el dinero pueden quedarse con esa cantidad y olvidarse de ti y en tercer punto, podrías ser víctima de grupos delictivos que ofrecen los famosos créditos gota a gota o los conocidos como monta deudas.
Estos préstamos que se ofertan principalmente a comerciantes y vendedores ambulantes, también se promueven por medio apps móviles, representan un riesgo para la seguridad y finanzas de las personas que los adquieren.
Al acceder a un crédito de este tipo, vía app móvil, le estarás dando acceso a las personas que operan la aplicación a toda tu información almacenada dentro del teléfono, como fotos, contactos u otros datos.
Los datos a los que acceden quienes controlan la app son utilizados para chantajear y extorsionar a las personas en caso de retrasarse en los pagos de los créditos o no poder seguir pagando.
La Condusef informó que existen delincuentes que a través de aplicaciones ofrecen prestarte dinero, pero también piden el acceso a tus contactos, fotografías en el celular o tus datos personales, mismos que utilizan para extorsionarte o a tu familia, en caso de no pagar.
¿Cómo lo hacen?
Se utiliza la información de tus contactos para exponerte ante ellos. Mandan textos de este tipo: “En representación de Financiera Pro, se le comunica que (nombre del contacto con la deuda), lo nombró referencia y por ello enviamos este mensaje”.
En otros de los mensajes afirman que habrá cuestiones legales en caso de que no se pague el préstamo:
“¡Aviso importante! Se te relaciona en la tentativa de incumplimiento de pago cometido. Se dedica a pedir préstamos y no pagarlos, dejándote cómo referencia haciéndolo partícipe de este incumplimiento (…) ya que lo dejaron a usted como referencia directa y encubrirlo o dar información falsa puede ser tomado como coalición de tentativa de incumplimiento de pago y esconderse o hacer caso omiso solo nos da pruebas para que se abra una carpeta de investigación en la fiscalía”.
Estos son algunos de los textos que se envían vía whatsapp, sin embargo, el tono de la cobranza avanza de nivel y se llegan hasta amenazas.
Algunas veces crean grupos de whatsapp con tus contactos para avisarles también de tu deuda, además te amenazan con publicar fotos tuyas o alguna información personal.
Ante esto, la Condusef alertó que en este tipo de casos no puede intervenir pues no se trata de empresas legalmente establecidas ni dentro del sistema financiero. Por esto, es importante que antes de aceptar un crédito revises que quien lo otorga es una entidad legal y supervisada por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores y por la Condusef.
Tampoco Profeco puede ayudar a las personas afectadas pues tampoco se trata de Sociedades Mercantiles.
¿Cómo funcionan?
Una vez que se accede al dinero a través de la aplicación, el préstamo debe pagarse desde la app, en línea Spei o con referencia en una tienda de conveniencia.
“Quien no paga, sufre de amenazas contra él y su familia, incluso de violencia física”, destacó la Condusef.
Para revisar que una empresa esté debidamente autorizada para otorgar créditos existe el Sistema de Registro de Prestadores de Servicios Financieros (Sipres), en esta plataforma se puede buscar el nombre de la entidad que te ofrece el préstamo y revisar tu estatus de registro.
Por ejemplo, si ya está regulada, si está en proceso de autorización, a qué categoría corresponde, si es Sofipo, fintech, sofom, etc.
Con información de El Universal
