Francia.- El gobierno de Francia aprobó este miércoles un toque de queda nocturno en París y las principales ciudades del país a partir del fin de semana, para frenar la imparable circulación del coronavirus, COVID-19, en una Europa que se prepara para lo peor.
En Francia ya se han registrado cerca de 33,000 muertos por coronavirus y más de 790,000 contagios. Actualmente hay 1,633 personas en cuidados intensivos y con asistencia respiratoria por covid-19 y la capacidad nacional es de 5,000 camas.
En este contexto, a partir de la medianoche del viernes y al menos durante un mes, los habitantes de París y otras ocho ciudades no podrán salir de casa entre las 21:00 y las 06:00 locales (19:00 y 04:00 GMT) salvo por motivos de salud o profesionales, bajo pena de una multa de 135 euros (158 dólares).
Casi 20 millones de personas se verán afectadas por estas nuevas medidas, que buscan frenar el avance del nuevo coronavirus.
“El toque de queda durará cuatro semanas e iremos al Parlamento para extenderlo hasta el 1 de diciembre. Seis semanas es el tiempo que creemos útil”, dijo el presidente Emmanuel Macron en una entrevista televisiva.
“Debemos actuar” ya que “la situación es preocupante”, dijo el jefe de Estado francés, que advirtió que la “segunda ola” ya se está abatiendo sobre el país.
La pandemia ha provocado al menos 1.08 millones de muertos en el mundo y 38.2 millones de contagios.
En Europa hay más de 244,000 fallecidos y 6.7 millones de casos. Es la región del planeta donde la epidemia avanzó más durante la semana pasada, datos que probablemente se repitan en la semana en curso.
En Alemania también se anuncian cambios. La canciller Angela Merkel quiere imponer nuevas restricciones, entre ellas ampliar el uso obligatorio de la mascarilla o adelantar el horario de cierre para bares y restaurantes en las zonas donde la tasa de contagio sobrepase los límites que se había fijado el gobierno.
Alemania comunicó 5,132 nuevos contagios declarados en 24 horas, es decir el mayor incremento desde hace seis meses, según el instituto de vigilancia epidemiológica Robert Koch.
Portugal se prepara igualmente para reforzar las restricciones y pedirá al parlamento que legisle sobre la obligatoriedad del uso de mascarilla en la calle y la descarga de una aplicación móvil de rastreo de contactos de covid-19.