Los Mochis, Sin.- Queremos que el gobernador Rubén Rocha Moya nos escuche, dijo el delegado del Sindicato Nacional del Autotransporte en el norte de Sinaloa, Mario Arturo Ruiz Soto, quien expuso la serie de inconvenientes económicos con los que opera el servic8o de pasaje público en la entidad, y sobre todo el urbano, pero además, dimensionó las condiciones en que funcionan las unidades, algunas destartaladas, fallas mecánicas y en pésimas situaciones mecánicas.
Al exponer la situación, dijo que la responsabilidad debe ser compartida, “necesitamos el apoyo del gobernador Rubén Rocha Moya, porque la situación está tan difícil ahorita, que es complicado sostener el transporte.
“Está al punto de llegar al colapso ya el transporte, entendemos que lo ven como una cuestión social, política y económica, pero no ven la realidad que estamos viviendo los transportistas durante los últimos dos años, donde se ha incrementado bastante el precio de los insumos”, señaló.
El usuario que nosotros movemos pues, le pega esta situación y lo entendemos.
Ruiz Soto se dolió que los han dejado solos como transportistas, “nosotros estamos subsidiando el descuento estudiantil, el apoyo a los discapacitados, y muchos apoyos más que nos piden. El transporte ha dejado de ser ya una situación de negocio, únicamente queremos mantenerlo”.
Ahorita los transportistas están metiéndole dinero de sus pensiones al camioncito que tienen, “muchos estamos endeudados en casas comerciales, instituciones bancarias, para poder sostener esto”.
Ruiz Soto dijo que no es una situación fácil, “han de decir, bueno, y por qué no lo dejan, porque esta ha sido nuestra vida, el transporte”.
Finalmente, Ruiz Soto dijo que en el caso del transporte urbano, “las unidades andan completamente hechas pedazos, no hay con qué repararlas, mucho menos hablar de unidades nuevas”.
Se busca la manera de cómo renovar el parque vehicular, pero ante la siutaicón económica está difícil, y el transporte foráneo se ha paralizado porque no hay con qué arreglarlas.
Antes los camiones de transporte de pasaje público eran de 40 asientos, pero ahora están las famosas sprinter de 19 a 20 pasajeros, y ni así se sostiene el servicio.
“Día con día va en decadencia…. Por eso queremos que el gobernador nos escuche”, reiteró Ruiz Soto.
