Guamúchil, Sin.- Carolina Ureta Gutiérrez, de 43 años de edad, es la única mujer taxista que trabaja en el municipio de Salvador Alvarado, quien señaló que ya tiene más de tres años en este oficio que empezó como un juego, pero se ha convertido en una fuente de ingresos importante para su familia.
Ureta Gutiérrez, tiene cuatro hijos y debido a las complicaciones económicas decidió apoyar a su esposo, quien la apoya totalmente para que pueda trabajar, señaló que durante el día se dedica de lleno al hogar y por las tardes y noches agarra el taxi, indicó que en ocasiones suele ser riesgoso trabajar el turno nocturno porque no se sabe quien pueda subirse al carro.
La taxista, externó que por fortuna nunca le ha tocado una situación de riesgo, aunque si siente temor cuando ve subirse a su taxi a una persona sospechosa, pero dijo que lo único malo que le ha pasado, es que algunos usuarios no quieran pagarle el traslado.
Carolina Ureta, señaló que regularmente empieza a trabajar desde las cuatro de la tarde y hasta las dos o tres de la mañana, aunque si ve que hay clientes, se queda hasta que amanece, indicó que aunque el turno de la noche es peligroso, lo prefiere porque le da tiempo de estar con la familia y además considera que el tráfico es más tranquilo.
La chofer del taxi, indicó que siempre ha sido sorpresa para sus clientes nuevos que una mujer sea la conductora, sin embargo dijo ha tenido muy buena aceptación de la gente porque les genera confianza y eso la ha llevado a hacer muchos amigos.
Carolina Ureta, comentó que mientras tenga vida y salud, seguirá de taxista, ya que le gusta lo que hace y además aporta a la economía de su hogar.
