Los Mochis, Sin.- Dentro del marco de los festejos por el Día de la Virgen de Guadalupe que se llevaron a cabo este 12 de diciembre en el Santuario, la ciudad de Los Mochis se regocijó con la visita de la máxima autoridad de la Iglesia Católica en Sinaloa, el Obispo Jesús José Herrera para presidir la misa especial por el 493 aniversario desde la aparición de la Virgen María en el Cerro del Tepeyac en el año de 1531.
Previo a presidir la Santa Misa, el Señor Obispo se dijo contento de que a pesar de los tiempos de violencia que se viven en el centro y sur de Sinaloa, la feligresía pudo vivir con gozo las celebraciones y peregrinaciones en honor a la Madre de todos los mexicanos en cada uno de los santuarios que lucieron abarrotados para celebrar uno de los festejos más importantes del pueblo mexicano, agradeciendo a Dios y a quienes son responsables de la inseguridad por permitir que los fieles creyentes pudieran llevar a cabo las procesiones en santa paz.
“La violencia no ha impedido que los fieles salgan para celebrar esta fiesta, los templos han estado abarrotados, ayer en la noche estuve en Culiacán en la Lomita y había mucha gente, agradecemos a Dios la posibilidad de seguir celebrando esta fiesta tan entrañable para nuestro pueblo y agradecer a quienes nos meten en esta situación de inseguridad que nos permitan celebrar y permitan a la gente celebrar su fe”
Asimismo, mencionó que a todo lo ancho del estado de Sinaloa se siguen llevando mensajes de fe y esperanza para los tiempos venideros, esperando que Sinaloa se recupere y salga adelante de este panorama de temor e incertidumbre por la ola de violencia.
“Claro que sí, es nuestra esperanza, el Papa Francisco nos ha invitado a iniciar el próximo año 2025 como peregrinos de la esperanza entonces como pueblo mexicano vivimos en esa esperanza, este tiempo de adviento nos invita a vivir en la esperanza”.
Al término de su mensaje, el Obispo Jesús José Herrera ofició la santa misa acompañado por el Monseñor Luis Manuel López Salazar en punto de las cuatro de la tarde, donde cientos de mochitenses se dieron cita para unirse en oración y pedir por la paz, por la vida y por la familia.